¿Quién empezó? O de dónde vienen las políticas en tiempos del León



Vivimos tiempos inciertos. El presidente de la nación pone su ideología por encima de las instituciones. La Constitución y el Congreso parecen estar debajo de las preferencias del ejecutivo. Los ciudadanos del país parecen desconcertados por la voracidad de las reformas propuestas. La falta de experiencia política ha llevado a que fracase el principal proyecto legislativo que tenía como objetivo sostener los principios de política que deseaba Javier Milei. Se asoman amenazas en el plano de la gobernabilidad y contendientes inscluso en el frente interno.

La política una vez más, parece reducida a su faz agonal. Pero, ¿Qué hay de las políticas públicas? 

Parece que han quedado relegadas a un segundo plano, al menos discursivo, por varias razones. En primer lugar la derrota legislativa fue enmarcada como victoria frente a los traidores propios ¿Por qué no se puede permitir una derrota en su haber el Presidente de la Nacion? En segundo lugar porque es un habil marcador de agenda, al menos la de los medios de comunicación y quizá en parte la opinión pública. En tercer lugar porque Milei ha hecho un todo de una parte, ha hegemonizado el enfoque macronegativo.

¿De qué se trata esto?

Señala el profesor Subirats (2014):

"Lo que las explicaciones corrientes tienen a menudo en común, es que recurren a argumentos que se sitúan en cómo funciona el sistema público en general. Si es tan difícil tomar las decisiones —y sobre todo aquéllas más importantes— algo debe haber que no funciona a nivel general, y por tanto lo lógico es modificar alguna característica institucional o sociopolítica que impide, o al menos obstaculiza, aquello que sería necesario". Esto es lo que se denomina enfoque macronegativo.

Y a continuación explica que tres son las caracteristicas de los intentos de explicación de este tipo:

1. Familiaridad y convencimiento:

La explicación general, al ser familiar y comprensible para todos, se presenta como una verdad irrefutable. Esta familiaridad la hace atractiva y fácil de aceptar, evitando la necesidad de un análisis más profundo.

2. Simplificación y resignación:

Preferimos estas explicaciones generales porque nos ahorran el esfuerzo de comprender las complejidades de cada fenómeno. Sin embargo, esta simplificación también genera un sentimiento de impotencia. Si cambiar el sistema parece tan difícil, es fácil caer en la resignación y abandonar la búsqueda de soluciones.

3. Impacto en la participación política:

La resignación alimenta la apatía y la indiferencia hacia las instituciones, debilitando la participación y el cambio social. Es un círculo vicioso que perpetúa la falta de acción y la perpetuación del sistema.

Vemos entonces como a tono con su discurso ideológico y de estado minimo, Javier Milei también esta operando una minimización en la lógica de construcción de políticas públicas.

Tradicionalmente encontramos una mixtura de enfoques basados en la realización del ideal cientifico en la provisión de información para la formulación de políticas públicas con el enfoque político democrático que busca que las mismas estén sometidas al control ciudadano, al menos indirecto al provenir de una decision de carcter político (aqui usando política en un sentido débil ya que en ambos casos estamos ante decisiones políticas).

¿Cuál es el otro desplazamiento producido por Javier Milei?

Tradicionalmente, como veíamos, la tensión se encontraba entre una lógica de la Tecnocracia y logica Política, que ahora se encuentra abandonada hacia un nuevo espacio de incertidumbre, que muchas veces se aborda tecnocraticamente, pero que en el discurso de Javier Milei aparece mitificado: El Mercado.

Es decir, que a demas del enfoque macronegativo, Milei propone que sea "El Mercado" el lugar de donde se promueva la lógica de formulación de políticas públicas, al menos en cuanto a la información y el análisis. 

Esto es, cuando menos imprudente, y cuando mucho peligroso. Porque niega el debate y la tensión entre las ciudadanía en un sistema poliárquico y las élites conduciendo. Muchas veces, al oculatar o desplazar estas dinámicas, se decide en favor de las elites. Por dos razones. Primero, porque son las élites las que controlan la información que circula y está disponible en los mercados. Segundo, porque son las elites las que conjugan el poder de veto de las iniciativas. Es decir que solo llegan al sistema político las inciativas permitidas por las elites debido a la diferencia de poder. 

Entonces, tanto si la nuestra fuera una sociedad corporativista, como si fuera una pluralista, lo que ha logrado Javier Milei es reconfigurar el proceso de formulación de políticas centrandolo en una lógica de poder. 

¿Qué pasará con la participació de la ciudadanía? ¿Por qué Milei se presenta como un ilustrado en economía para imponer una racionalidad sin cuestionamientos? ¿Demostrada como queda la lógica de poder, quienes son los beneficiarios de esta dinámica de formulación de políticas? Está claro que el ciudadano de a pie no lo es.

¿Veremos alguna formulación de políticas que vayan más alla del vaciamiento presupuestario para cumplir con objetivos fiscales o pasará el presidente 3 horas al día likeando twits en X durante todo su mandato? 

Y vos, ¿Qué harías si tu día tuviera 3 horas extra? 


Bibliografía

Dente, B., & Humet, J. S. (2014). Decisiones públicas. Editorial Ariel.

Lindblom, C. (2006). Políticas públicas . Brasília: ENAP.

Comentarios

  1. Interesante enfoque teniendo en cuenta que estos tiempos pareciera que la participación de al menos una parte de la ciudadania se limita solo a las redes sociales, la otra pienso particularmente que la encontraremos en las calles

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  2. Gracias por el comentario Diego! Sí, hay mucha tela para cortar pensando en la participación. Pero siempre parece que retrocedemos. Hay que ver que pasa con la opinión pública y por qué se mantiene estable el apoyo a milei estos meses de 2024.

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